Todos sabéis que he sido y seguiré siendo hasta el infinito y mas allá, un fanático del House. Desde sus inicios en Chicago a mediado de los 80, no he parado un momento de disfrutar y promocionar este género de música electrónica que es el padre sin lugar a dudas, de tantos nuevos estilos que hoy en pleno siglo XXI completan la escena de música de baile actual.
Hoy quiero recordar con agrado y no con poca melancolía un fenómeno que aconteció en Italia a principio de los 90.
En Italia siempre ha habido una gran cultura musical, desde Patty Bravo y su “Piccola Bambola” hasta el genio percusionista Tullio de Piscopo y su «Primavera”, son cientos los artistas que han deleitado a medio mundo con su buen hacer.
Como todos sabéis, a finales de los 80 el House americano era el “Rey de las pistas de baile”. Hizo falta esperar bien poco para que las producciones de House se empezaran a hacer en Europa tambien. Dejando a un lado el Acid británico y el New Beat belga, si hubo un sonido que particularmente me atrapó por aquel entonces, ese fué sin lugar a dudas el nuevo “House Underground” producido en Italia.
De la mano de productores de la talla de Mr Marvin, Don Carlos, Andrea Gemoloto de la “Dance Floor Corporation”, creador del mítico “Sueño Latíno” y de DJs tan emblemáticos como Ricky Montanari, Leo Mas, Ralf, Alex Neri, Claudio Coccoluto, Flavio Vecchi y tantos otros, nace el Italia un movimiento musical autóctono digno de envidiar, sobre todo por nosotros ya que lo mas parecido a un sonido propio que teníamos en los 90 era la “Ruta del Bacalao”.
Como decía, en Italia se hicieron las cosas bien hechas. Clubes como el Ethos Mama, Vae victis, Echoes, Matis y me dejo unos cuantos, hacían las delicias de un público entregado y fiel y fueron junto a los Djs los verdarderos artífices de aquel suceso.
Los DJ s italianos eran unos maestros para mezclar vinilos, solían hacerlo con dos copias del mismo disco. De esta manera hacían sus propios “edits” en vivo, algo que yo no había visto aún en mis diez años de carrea por aquel entonces.
Si digo “Made in Italy”, es porque ellos crearon un sonido particular, su sonido, parecido al americano si, pero con unos matices cálidos, mediterráneo si quereis, que hacían de todo aquello algo único.
Solía pìnchar bastante en Italia en esa época. Es por eso que viví insitu este fenómeno y os aseguro que era muy distinto a otros que ya conocía. Tan profundo y con tanto sentimiento…
He preparado con todo mi cariño y después de desempolvar los vinilos de las estanterías, un Mixtape para que podáis tener una idea de lo que fué y el tiempo se llevó el fabuloso sonido “Underground” “Made in Italy”.
ARTÍCULO PARA LA FANTÁSTICA WEB FINLANDIACLUB.
CESAR DE MELERO 